«F-ONE I ADDIKTED»: El poder de una ola, la obsesión de Mitu Monteiro

El video «F-ONE I ADDIKTED«, publicado en el canal de Youtube de F-ONE, nos sumerge en una historia visceral, íntima y poderosa sobre la adicción a las olas. A través del relato del legendario kitesurfista Mitu Monteiro, descubrimos la búsqueda obsesiva de una de las olas más especiales —y peligrosas— del planeta.

Una ola que lo cambia todo

Para Mitu, el océano lo es todo. Es su refugio, su motor y su vida. Por eso no duda en definirse como “realmente adicto”. El video nos transporta a un lugar remoto, un sueño de su infancia, al que comenzó a ir desde los 14 años. Aunque intentó llevar a amigos para pescar, “nadie quería ir”, recuerda. El miedo a esa ola era real.

Y no es para menos. Esta ola es poderosa, salvaje y peligrosa, con un escalón brutal que desafía al instinto. “Es la ola más aterradora que he kiteado jamás”, confiesa Mitu. Pero también la más especial. No es perfecta, y eso es lo que la hace única.

“No hay muchos lugares en el mundo con una ola así. Esta es realmente especial.”

Adicto al tubo

El corazón de esta adicción tiene nombre: el tubo. Meterse en él, dejarse envolver, flotar entre el caos y la calma, es lo que ha perseguido toda su vida. Mitu lo resume así: “es una sensación increíble”. Su viaje, su destino, su motivo de volver siempre, es esa experiencia.

“Mi adicción son los tubos. Por eso siempre he querido volver a este lugar.”

El miedo se vuelve personal

Pero no todo es emoción. También hay temor, especialmente cuando el peligro se extiende a lo más profundo: la familia. En uno de los momentos más intensos del video, Mitu ve a su hijo, Michael, meterse dentro de un tubo profundo.

“Me sentí más estresado que él”, confiesa.

Es en ese instante donde se cruzan dos mundos: el del rider profesional y el del padre. El mar, que tantas veces lo ha llamado, se convierte en prueba emocional. Hay una tensión entre quedarse por el placer… y salir por supervivencia.

“Quieres quedarte más tiempo porque la sensación es muy buena, pero sabes que necesitas salir. No quieres chocar.”

Una obsesión sin final

Y aun así, el deseo de volver no desaparece. Al contrario: crece. Encontrar la ola correcta sigue siendo su motor. Es, como dice Mitu, “una visión tan loca”. Cada viaje, cada sesión, es una oportunidad de sentirlo de nuevo.

“Siempre quiero perseguir esta ola. Volar por encima del sol. Es lo que hace que todo esto sea tan divertido.”

La conexión con el océano y la búsqueda incesante de esa experiencia perfecta resumen la esencia de «F-ONE I ADDIKTED». No es solo un video de surf. Es un retrato de pasión, legado y amor por el mar, contado por alguien que no sabe —ni quiere— dejar de buscar.

 ¡Que las olas y el viento te acompañen!www.foneproshop.com